¿Es necesario sentir angustia o tristeza para ir a un psicólogo? ¿Son ciertos estados negativos lo único que un profesional de la rama puede tratar? Seguramente te hayas preguntado por los beneficios de hacer terapia con un psicólogo, así que desgranamos algunos de ellos.
Una pista: ir a terapia psicológica te dota de herramientas para mantener o volver a encontrar el equilibrio. Eso sí, es un proceso de acompañamiento y asesoría que lleva su tiempo, no esperes soluciones de hoy para mañana ni que el profesional tenga respuestas para todo.
1. Te otorgas tiempo y espacio
El autocuidado es necesario, y solemos tenerlo claro a la hora de comer bien, descansar o hacer ejercicio (aunque no siempre nos sale bien). Pero vivimos sumidos en tanta prisa que no tenemos tiempo para identificar y atajar aquello que nos genera angustia, así que pararse el tiempo necesario para hablarlo con un profesional puede ser el mejor reconstituyente.
2. Te ayuda a tomar conciencia de ti mismo/a
Una emoción negativa parte de algo, por mucho que no lo vemos o que no lo queramos asumir. Hacer una introspectiva para poder explicarlo ayuda a tomar conciencia de esos miedos y preocupaciones, para así empezar a manejarlos.
3. Identifica tus problemas y te ayuda a entenderlos y tratarlos
Además de tomar conciencia sobre ellos, las técnicas y estrategias que un profesional te propone pueden ayudarte a obtener habilidades para recuperar y mantener el equilibrio. En el proceso, te supervisará y evaluará para ver cómo están funcionando.
4. Mejora tus relaciones
Destacamos una, la más importante: la que tienes contigo mismo/a. Una vez estés en armonía y sepas qué te afecta y por qué, podrás mejorar también tus relaciones con los demás.
5. Creces personalmente
El crecimiento personal es algo que deriva de todo lo anterior, y tiene que ver con la gestión emocional que eres capaz de hacer a partir de tus visitas al psicólogo.
Así pues, los beneficios de hacer terapia con un psicólogo son muchos, pero lo primero es tomar conciencia del problema y acudir antes de que ese malestar emocional se acreciente.